Crónica cinematográfica del cortometraje “Cachorro”, la dura lucha por la vida en México D.F.
Por Fernando Tresviernes
“Cachorro” es un corto mexicano de 10’19 minutos con dirección, guión, montaje y fotografía de Tonalli Melo realizado en 2014. Producido por La bacanal films. El corto está dedicado a la memoria de la veterana actriz María Dolores Oliva.
No confundir con otro corto del mismo título dirigido en 2017 por el español Jesús Rivera Soriano.
Sitio web: www.instagram.com/labacanalfilms
“Haciendo la calle”
Éste corto mexicano trata la historia de un adolescente que se prostituye en la Alameda Principal, cerca del céntrico Palacio de Bellas Artes en México D.F., Allí es contactado por un hombre que le lleva a su piso donde comienzan a tener sexo. Mientras el cliente se ducha, el muchacho se va robando su cazadora para despojarle la cartera. Interpretaciones realistas de ambos personajes masculinos.
El montaje presenta hilvanados los planos de manera que son muy expresivos del intercambio del “chapero”. El chico se prostituye claramente por dinero sin disfrutar del sexo.
Pagar dinero para paliar la soledad
La siguiente secuencia le presenta viajando en el coche de una atractiva y elegante mujer mayor que le lleva a visitar un parque arqueológico en las cercanías de la capital. Pasan la tarde fotografiándose ante el templo azteca aliviando la soledad de la mujer, bien interpretada por María Dolores Oliva.
En ésta larga segunda secuencia predomina el lenguaje no verbal que deja libre a nuestra imaginación lo que no se ve para que cada cual lo interprete.
Tras regresar a la capital le da dinero por haberla acompañado y aunque en un principio lo rechaza luego le propone verse al día siguiente.
La música original de Jesús Balderramos “El Chuchinsky” planea sobre todo el corto remarcando la acción dramática.
La hipocresía social “bienpensante”
“Cachorro” afronta de manera sutil una realidad visible aunque vergonzante para la sociedad mexicana. La prostitución de jóvenes de ambos sexos para sobrevivir diariamente.
Las escenas de sexo son muy ligeras pese a la advertencia previa de que el corto puede herir la sensibilidad de espectadores. Más agrede la recreación extrema de la violencia en muchos cortos y largometrajes sin que nunca se haga tal advertencia.