Let’s Eat sigue la historia de una madre inmigrante y su hija mientras navegan a través de la belleza y los desafíos de la vida. A pesar de las dificultades que enfrentan, el calor y el amor de la familia brindan consuelo y cercanía, y la cocina se convierte en un símbolo de su amor incondicional el uno por el otro.

Let’s Eat es un cortometraje animado de 8 minutos que se centra en la relación entre una madre y una hija en una familia de inmigrantes chino-estadounidenses. Let’s Eat se esfuerza por ser una historia universal contada a través de una voz distintivamente asiático-estadounidense. Como madre soltera en un país desconocido, toda la vida de Ma se centra en criar a Luan, su inquieta hija pequeña. Del mismo modo, Luan pasa su infancia disfrutando de tiempo de calidad con su madre juguetona y amorosa. Sin embargo, a medida que Luan crece, no pasa mucho tiempo antes de que la vida cotidiana interfiera y provoque que madre e hija se separen. Al canalizar sus sentimientos hacia la cocina, las dos se esfuerzan por encontrar el camino de regreso. ​La historia de Ma y Luan toca las relaciones madre-hija, la experiencia de los inmigrantes estadounidenses y la traducción tácita del amor en comida, temas familiares reflejados a través de una nueva perspectiva que a menudo se pasa por alto en los principales medios de comunicación. En Anamon Studios, su objetivo es compartir sus similitudes tanto como celebran nuestras diferencias, y con este fin, esperan que Let’s Eat resuene entre audiencias de todos los orígenes y experiencias.