Historia de una venganza
Ópera prima del guionista y director Miguel A. Almanza
Las pesadillas de Alberto Soto es el primer largometraje del director malagueño Miguel A. Almanza, autor de numerosos y premiados cortos. Realizado en el año 2020 y con duración 90 minutos, está producido por la compañía española MangAncha.
Dramático thriller sobre la tormentosa vida de su protagonista principal, entre su asistencia a la terapia psicológica y su relación con un amigo muy peculiar.
Con un cuidado guion del director, disecciona bien las consecuencias del trauma del abuso escolar sobre la víctima con la violencia sobre sí mismo, la vergüenza de haber sido maltratado, los efectos en el agresor, así como la relación entre la ira y el coraje.
La tensa trama de las violencias
Escrito en un lenguaje muy natural, está rodado por la cámara del director con abundancia de primeros planos que aumentan el dramatismo y la credibilidad de las secuencias. La música compuesta por Antonio Meliveo en banda sonora de percusión continua que aumenta la tensión del drama, completa bien el clima de la película.
Alberto Soto (Andrés Suárez) es el protagonista principal, que arrastra graves secuelas del acoso escolar, estando atormentado por sus pesadillas en el día a día. Se debate entre la relación terapéutica con la didáctica psicóloga María (Macarena García) y su amigo de muchos años (Salva Reina) con quien comparte litronas de alcohol y se desconcierta por sus disparatados consejos.
Están muy bien construidos los diálogos de las sesiones de las consultas psicológicas, magníficamente interpretados por la actriz. El argumento hace que la trama mantenga a lo largo de la película la tensión, hilando bien la acción dramática con las diversas formas de violencia que aparecen en el entorno de la víctima principal.
Acertada creación e interpretación de los personajes secundarios
Los personajes secundarios han sido bien creados e interpretados, como la pareja formada por la celotípica Carmen (Carmen Vega) y el sufrido Rafa (Rafael Puerto), Lola (Diana Navarro) la amiga empática de Carmen, el vecino Paco policía nacional (Juanma Lara), su resolutivo abogado (Alex O’Dogherty), el conflictivo cliente de bar (Juan Carlos Montilla) y otros más.
Durante la segunda mitad de “Las pesadillas de Alberto Soto” sobrevuela la idea y obsesión de la venganza, la inseguridad y la necesidad de liberarse de la gran presión que sienten varios de sus protagonistas por la violencia temida o vivida.
La tensión dramática se mantiene muy bien de principio a fin, sin decaer a en ningún momento, gracias al acertado ensamblaje de las secuencias en el montaje de la película.