Un niño, cuyo ídolo es Arconada, quiere ser como ese portero de la Real Sociedad y para ello juega todos los días en el recreo con sus compañeros defendiendo la portería. Como bien dice Luis Landa (protagonista del corto) “todo portero tiene sus enemigos”, en el caso de Unai se trata de un matón llamado Diego. Dicho chico es notablemente más alto y fuerte que el futuro aspirante a Arconada y gracias a ello se mete con él, pero no de la forma clásica a la que todos estamos acostumbrados… No… El ingenioso matón es todo un artista en la manipulación de la imagen y utiliza sus dotes para avergonzar al portero con fotos denigrantes. Gracias a la ayuda de su mejor amigo, Unai consigue hacer que los demás chicos con los que juega al fútbol planten cara a Diego haciendo que se vaya el avergonzado. Fuente: http://alhamaalcine.blogspot.com.es/ Cortometraje realizado en las colonias urbanas «Un Agosto de Película» del verano 2015 organizadas por Fundación Dédalo y dirigido por Julio Mazarico