La gente debería estar feliz. Incluso este ganso egipcio, que intenta hechizarnos con una danza seductora. Pero no es el único que domina el baile. Pronto el agua comienza a subir. Una poesía de voz pesada y tempo lento, características que en principio, nos apartan del ideal de felicidad presagiada. La lírica de este single es melancólica, incluso desgarradora, pues se compone de breves historias cantadas/narradas a manera de anécdota, todas ellas de anticipado triste final, lo que fortalece la voz de Mark para proclamar solemne, “People should be happy” (la gente debería ser feliz). La animación es un trabajo de la ilustradora parisina Alice Saey, quien resolvió en imagen, a través de técnicas mixtas, del análogo al digital, en un proceso artístico y metódico, la forma y el movimiento de este personaje, ave piquicorta que protagoniza el videoclip. Fuente: www.apocrifa.com.mx/happy-lotterman People should be happy. Even this Egyptian goose, who tries to cast a spell on us with a seductive dance. But it’s not the only one to master the dance. Soon the water begins to rise